Homenaje
a Antonio Baldellou Serena, Tony, gaitero.
Graus,
25 de enero de 2014
Ha llovíu mucho desde qu’allá po’l
año 70 Betato mos enseñaba en el Centro. P'algunos fa mucho pero pa nusotros,
con lo ben que mo l'hen pasáu con la gaita y con los danzantes, ha síu como
antiayer. Betato va sé nuestro maestro. Teniba’l ritmo en la cabeza tan
ben metíu que cuan va faltá él, los danzantes mos diban (y el que más Ramón
Cosialls): más aprisa, más ritmo, que Betato’l feba mejor…. Pa’l año
1971 ya mos va dejá solos y no veigaz los nervios que se pasan con 11 años pa
tení que tocá l’Albada al Santo Cristo… Tú, Tony, nunca vas querí tocála, dibas
que lo fese otro… pero ixe otro siempre eba yo. Ixo sí, cuan llegaban a la
calle la gaita tuya sonaba como un Cardelina. Clara, recta, daba igual
qu’estases solo que con cinco más, pues el ritmo siempre eba'l que tú mos
marcabas… y fijo, como un motor de gasoil qu’arrancas y no se para nunca…
Tonón de Baldomera eba nuestra faro. Siempre estaba al
láu pa corregimos y marcámos el ritmo. Estaba obsesionáu porque tó salise
siempre perfecto, que se bailase ben y por ixo teniban que tocá to lo ben que
podesen. Ixo sí, cuan llegaban a los ensayos jamás mos vá dí debán de toz si lo
feban ben u mal… La tarde del 12 mandaba al zagal, Baldomera Fillo, o a Betato
o a tú a la cantina Celia y años dispués al Centro a buscá aquellos bocadillos
de siete lleguas pllenos de tortilla de patata y jamón o de llomo, pa í a
merendá antes de llegá’l puente. Mos contaba muchas cosas de Graus, de las tradicións,
de las fiestas, pero nusotros eban unos críos. ¡Llástima no habélo podíu grabá
entonces!
Enseguida van tení nuevos compañeros
pues l’afición por tocá la gaita eba potente. El primero mi hermano Ramón,
Fernando Riverola, Pepe de Maella, Bernabéu va torná algún año, Toñín de
Baldomera que dispués va cambiá’l bot po'l trabuco y el canto d’albadas... No
los quiero nombrá a toz, ya los hez lleíu en mi libro.
Los años pasaban y siempre, al llegá
agosto, tornaban a los ensayos hasta que te vas cansá d’ellos y a los demás mos
tocaba traballá más… pero, oye, sarna con gusto… Siempre detrás del segundo
repatán vas veyé a los danzantes, la Fiesta, a Graus, con un punto de vista
imposible de tení en otro llugá. Mos van presentá a políticos y van viví directamente
accidentes de los trabucos, van conocé muchas presonas y personajillos,
sentíban cantá albadas que paeceban milagros de la voz y otras que mejor
dejálas está…
Eban de los primeros en llegá a la
Pllaza pa formá a los danzantes y empezá la procesión. Durante muchos años van
sé a la fuerza la referencia dentro del grupo porque eban los más viejos.
¡Cuántas veces van tení que diles a los repatáns por one teniban que í y one
iban a bailá! Hasta explicáles one está Casa Maella…
¿T’acordas cuanta albaca mos tiraban
de Casa Périz? ¿Y Catalané? Sacaba una paca entera y mo la tiraba, a piazos,
cuan pasaban por casa d'él pa la Pllega. Mo la posaban en la faixa y dispués en
casa unas broncas por lleva la camisa teñida de verde… Pa la Pllega siempre
tenibas a tu primo Alberto invitáu en casa y teniban que recogete po la
carretera… Pero dispués, ¡ay, copón!, chuflabas más que ninguno (y tamé te lo
bebebas tó…). Eban años en los que teniban qu’empezá a las tres en punto
p’acabá a las cinco qu’empezaban los toros. Aún no viviba ninguno al otro lau
del río más qu'el Alcalde Subías y los de las Aguas….
Van empezá con aquellas gaitas
gallegas de boticos de goma que s’encharcaban y cuan más tranquilo estabas
tocán te soltaban un chorro de aigua más negra qu’el aceite quemáu. Eban de
palosanto y marchaban muy ben. Pero un día te va traé una gaita aragonesa, con
un boto que díbas que no te cabría debajo'l brazo. El boto va cabé pero los
dedos no te llegaban a los foráus. Nunca hen sabíu si las manos eban chicotas o
la gaita muy gran… Van tení que sacále la bordoneta y dejá solo el clarín. Así,
siempre se sabeba cual eba la tuya gaita. Algunos, y no me miro a ninguno,
diban que queribas imitá a Ramón Cosialls…
Teniban buenos trajes. De críos mos
los feban en casa pero dispués mos los dejaba la Asociación. Yo procuraba
siempre que si ñeba que cambiá algún traje de baturro, siempre los nuevos los
estrenasen los gaiteros, que los cuidaban más que los de las cintas… Tamé van
conocé la llegada del traje de volantes, los turbantes y los nuevos trajes de
los repatáns.
De las cosas que mos van pasá por los
llugás daría pa fé un libro más llargo que la Biblia… Con los dances hen íu a llugás como Gijón en 1974. ¡Quí l'heba de imaginá!... Tamé van í a sitios
más cerqueta: La de veces qu’en bajáu a Balbastro y a Huesca. Otra vez van í a
Binéfar, y pa podé bailá las cintas van tení que metémos de pareja dos
gaiteros… Van está en 1971 en L’Aínsa cantán albadas y en el homenaje a Alfonso
Zapater que le va fé el Heraldo en Zaragoza y aún m’acordo de un día en las
Fiestas del Pilar que van í al Cachirulo, con Baldomera, a cantále albadas al
Ministro de Información y Turismo Manuel Fraga…
El último viaje con danzantes que vas
fé al extranjero va sé el de Vilanova y la Geltrú, ya fa unos años… Pero no
puedo dejá de recordáte aquel día en Huesca que los cabezudos heban lleváu unos
cañizos con la idea de fé explotá las sandías orientán la onda explosiva hacia
San Lorenzo y el obispo y los curas. Su error va sé fé una prueba al láu d’una
gasolinera pos los mandamases de Huesca no les van dejá
explotá ninguna más…
Tú con los críos no tenibas mucha
relación. Cuan van creá el grupo de danzantes infantiles (ojo, las cintas
infantiles ya existiban) sobre 1985, van partí el grupo pa la Pllega pero nunca
vas querí í con ellos… Tamé é de dí que yo estaba más tranquilo de que ises con
los grans y controlases a ixa caterba de gaiterez que teníban: Roberto, César,
José Mari, Santi Monclús, Girón, Codoñer… Ahora, que tos hez acostumbráu a fé
unas paradas tan llargas que acabá la Pllega antes de las ocho paece un
milagro.
Hen compartíu más de cuarenta años de
gaiteros en un llugá privilegiáu entre los danzantes y tenín la gran suerte de
podé contá que los hen fecho bailá tan aprisa u tan despacio como mos ha dáu la
gana. Hen conocíu a muchos y tamé muchas veces hen pensau en tirá los trastos,
por supuesto a la cabeza de algunos. Pero ¿sabes, qué?…. Que mos saquen lo
bailáu…
Los años pasan y veigo que t’has
cansáu. Alguna vez m’ebas dicho que si seguibas eba porque yo t’empujaba pero
tú nunca vas caé en la cuenta de que eba yo’l que seguiba porque tú seguibas.
Este año ya mos has dejáu. Espero que no dejes de vení a almorzá con los
gaiteros…
Mos hese gustáu que, como un famoso
torero, heses esperáu a entrá po’l portal y, paránte debajo, t'heses despedíu
de toz. Tú en cambio t’en has íu en silencio. Nunca vas gritá más que otros
pero siempre vas sé ixa persona en la que los demás mos apoyaban y por tanto,
imprescindible. En la segunda mitá de vida que te auguro llarga seguro que
disfrutarás veyén a los gaiteros llegán po’l puente, entrán po'l portal acompañáus
po los danzantes. Cuan vaigas a la pllaza a vé los dances siempre tendrás un
sitio al lau nuestro y cuan po la noche sientas una albada podrás dí muy
orgulloso: Yo va sé gaitero de Graus.
Mariano Pascual. Enero 2014.